miércoles, septiembre 18

Mutilaciones III












El cuerpo me reclama tanto llanto
ya no siente como antes,
evita las emociones,
ni siquiera el libido se muestra interesado.
Las lágrimas se agotaron de andar mi ánimo.
Y se marcharon.
Ya no queda nada que pueda derramar,

salvo mi sangre.

No hay comentarios: